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domingo, 1 de abril de 2012

BARRAX, QUIZÁS NO MÁS...

Antes de nada decir, que en lo deportivo la organización, el pueblo y colaboradores han estado todo bien (agua, recorrido, animación, etc).
No quisiera que nadie tome mis palabras como algo hiriente hacía un pueblo, al cual no conozco pero que supongo realiza un gran esfuerzo para albergar en su seno una carrera de esta envergadura.
Mi crítica es contra esas personas que en todas las carreras del circuito, pero que en esta me han tocado de lleno, se colocan un peto de la organización y se toman su labor tan apecho que se olvidan que están allí para colaborar y no para evitar que te cueles por la puerta del Santiago Bernabeu para ver un Madrid- Barcelona.
Esta gente debería saber que su labor empieza y termina cuando te dan la bolsa o el bocadillo de chorizo. No es de recibo que en una carrera en la cual pasada la barrera de "los seguratas" te encuentras unas mesas llenas de panchitos, naranjas y platanos resecos al sol, patatas fritas y algo de cortezas, que te pongan poco más que a cachearte si intentas pasar con tu chiquilla de 4 años al aseo.
Si, esto es del genero tonto, mi chiquilla de 4 años no la dejaban pasar al baño, y he tenido que decirle al chico del peto verde que iba a coger mi papel del crono, y aun así se ha quedado mosca, como diciendo si, si, tu vas a beber algo y a comer con tu hija de 4 años. Pero bueno tu mujer no entra, así te fastidio un poco, habrá pensado. Mira tu los manjares de los que estabamos hablando.
Pero bueno lo cierto es que iba al baño y lo que pensara él o el compañero me daba igual. Si el compañero que en una mano se estaba metiendo entre pecho y espalda un bocata de chorizo y con la otra mano daba bocadillos a los que llegaban rezagados, eso sí que era digno de un cuadro de 80.000 euros y no el del Sr. Bono.
Mi sorpresa ha sido al llegar al baño de los chicos. Estaba a tope con los atletas duchandose y claro he tenido que pedirle  a una chica que no conocía de nada que hiciese el favor de ayudar a mi hija de 4 años a hacer pis, todo por que algunas personas muy celosas de su labor no dejan pasar a las parejas de unos pardillos que han pagado 7 euros o 10 euros por ir a correr a un pueblo que (y espero no se me entienda mal), organiza una carrera sin más encanto, que la de pasar una tarde haciendo algo que te gusta en compañia de tu familia.
Por que saben, el año que viene igual me toca ir solo o quizas no voy. Pero como yo mucha gente.
Sin ir más lejos un amigo que ha venido con su mujer y sus dos chiquillas pequeñas desde Albacete, al que su mujer le ha dicho, para esto y pasar calor no vengo. Además hemos tenido que comer a la 13:00, para pasar toda la tarde aquí, sin un parque con sombra donde estar con las niñas.
Si señores y señoras de la organización mientras nosotros corremos nuestras sufridas parejas pasan cierta incomodidad, pues no estamos cerca de casa como para ir y volver.
Piensen ustedes que algunos hemos trabajado y hacemos a nuestros maridos, esposas, hijos e hijas y demás familias comer a unas horas interpectivas para poder ir a correr sin tener la comida en la boca.
Que para ellos si sumamos los precios del combustible del coche, inscripciones y demás... somós unos bichos raros.
Pero bueno luego se oyen ciertas burradas, como la de una mujer que no puedo decir nada, sólo que me han dicho que era la Sra. Alcaldesa, pero igual era una concejala o vete tu a saber, pero lo cierto es que mandaba, eso sí lo he visto. Y de la cual he escuchado que decía, no dejar pasar a nadie que no haya participado en la carrera, que el año pasado nos quitarón no se cuentas bolsas. Pero vamos bolsas de que. Si el año pasado la camiseta de algodón  la está utilizando mi mujer para limpiar los cristales, y por lo demás menudas bolsas que dierón, yo flipo...
Bueno, que lo de hoy ha sido algo de lo que yo, siento vergúenza ajena.
Además que por favor, pienselo bien, cuantos panchitos pueden tomarse los acompañantes, cuando van simplemente por acompañar a los que corren y a estos (los que corremos), lo que nos apetece es llegar a nuestra casa y ducharnos. Pues ya ves.
Como estan las cabezas, Señor....

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